La Diócesis de Limón celebró con entusiasmo la inauguración de la Casa de la Juventud Carlos Acutis, un espacio diseñado para ser el hogar espiritual y social de los jóvenes de todo el país. Este nuevo proyecto, fruto de la colaboración entre la Central de Juventud y la Diócesis de Limón, en coordinación con la Pastoral Juvenil promete transformar la vida de cientos de jóvenes al ofrecerles un lugar donde crecer en su fe, desarrollar sus talentos y construir un futuro lleno de esperanza.
La celebración comenzó con la solemne Eucaristía presidida por Monseñor Javier Román, Obispo de Limón. Durante su homilía, reflexionó sobre el pasaje de las bodas de Caná, donde Jesús, al convertir el agua en vino, demostró cómo actúa en nuestras realidades concretas para transformarlas.
Monseñor invitó a los fieles a reflexionar sobre qué “vino” falta en nuestra sociedad actual, destacando valores esenciales como la fe, el amor, el compromiso, el respeto, el testimonio y la oración. Subrayó que estas carencias afectan especialmente a la familia, que es el núcleo fundamental de la sociedad, y exhortó a rescatar a la juventud para que recupere esos valores. Inspirado por las palabras de la Virgen María: “Hagan todo lo que Él les diga”, llamó a los jóvenes a vivir su compromiso cristiano sin miedo, siendo testigos de esperanza.
La Misa también incluyó el envío de misioneros colombianos y españoles, quienes fueron animados a ser luz y esperanza en la comunidad. Posteriormente, se llevó a cabo el simbólico corte de cinta y la bendición de los espacios, marcando el inicio de esta nueva etapa para la juventud católica.
La jornada continuó con momentos de adoración eucarística, además de actividades como música, danza y espacios para compartir con los jóvenes que asistieron a la inauguración de las diócesis de Tilarán, la Arquidiócesis de San José, la Diócesis de Ciudad Quesada y la Diócesis de Limón, quienes participaron activamente de todas las actividades.
Un agradecimiento especial
Durante el evento, se expresó un especial agradecimiento a Dios y a todos los colaboradores que hicieron posible este proyecto. Elizabeth Salcedo, representante misionera de Central de Juventud destacó el trabajo en equipo y los muchos “sí” que permitieron la realización de esta iniciativa.
La Casa de la Juventud Carlos Acutis es un regalo para toda la juventud de Costa Rica, un espacio que buscará formar líderes, fortalecer la fe y promover la esperanza. La Diócesis de Limón invita a todos los jóvenes a unirse a esta gran iniciativa y ser parte de este camino de transformación y comunión.
¡Hagamos lío y construyamos juntos el Reino de Dios!